Dos Días en el Corazón de Gredos

Embárcate en una experiencia única de dos días por el alma salvaje de la Sierra de Gredos, donde cada paso entre piornos, canales y lagunas es una conversación con la tierra. Partimos desde la conocida Plataforma de Gredos, con el frescor de la mañana y el murmullo del sendero marcando el inicio de una ruta exigente pero profundamente gratificante.

Ascendemos con calma, dejando atrás los Barrerones y cruzando el altiplano rumbo a Cabeza Nevada, también conocida como El Cervunal. Desde allí, las vistas se abren al infinito: el Circo de Gredos se despliega bajo nuestros pies y también el circo de cinco lagunas, tallado por glaciares y tiempo. El descenso nos lleva a uno de esos rincones que parecen inventados por la imaginación: la Charca Esmeralda, una piscina natural de aguas frías y turquesas donde el cuerpo se renueva y el alma se rinde al asombro.

Al caer la tarde, montamos nuestro vivac entre los bloques de granito, y cocinamos o sacamos nuestras viandas y compartimos historias bajo un cielo tachonado de estrellas. Dormir al aire libre, rodeados de silencio y montaña, es una de esas vivencias que se guardan para siempre.

La segunda jornada comienza sin prisas, pero con la mirada puesta en lo alto. El terreno se retuerce entre canales y riscos hasta alcanzar la cima del Casquerazo, y poco después, la recompensa definitiva: el Morezón. Desde su cumbre, contemplamos todo lo recorrido. Allí, entre viento limpio y roca antigua, todo cobra sentido.

Dos días de montaña auténtica, sin artificios. Una aventura para los que buscan sudar, reír, pensar y sentir. Para quienes entienden que en la montaña, menos es más… y que dormir bajo las estrellas es recordar quiénes somos.